AHORA DE NUEVO
Autora: Raquel Moreno Robles
Fotografía: Mar Ruiz de Pascual Gutiérrez
Precio: 13 €
Fecha publicación: 06/2022
Formato, páginas: Tapa blanda intervenida, cinta marcapáginas, 78 páginas.
Incluye póster plegado.
Medidas: 130 x 190 mm
ISBN: 978-84-121076-9-2
PROPUESTA:
Safo existió. Vivió en la isla de Lesbos (Grecia) alrededor del año 630 a.c. y murió en Léucade en 580 a. c. Sufrió un destierro por motivos políticos en Siracusa (Sicilia); a juzgar por algunos de sus poemas debió resultar doloroso (fragmentos 98A y 98B). Escribió 9 libros de poemas. Fue respetada y valorada por su propia contemporaneidad y su influencia ha llegado hasta el presente. En el S.XI d.c. su obra fue condenada a la hoguera por la iglesia católica y prácticamente desapareció por completo. Conocemos restos en forma de fragmentos y citas en obras de autores clásicos.
Compuso poesía denominada lírica, pues los poemas se recitaban acompañados con música de lira. Sus composiciones musicales se han perdido. No la conocemos ni como instrumentista ni como compositora. Sí podemos advertir que amaba la lira por referencia en ciertos poemas (fragmentos 57, 103, 118, 156 o 176). Quizá la poesía era el complemento de la música y no al contrario.
Un único poema nos ha llegado completo (fragmento 1).
Tenemos una gran distancia temporal con Safo. Nos separan 27 siglos, sin embargo, todavía desde nuestro presente nos alcanzan algunas de sus palabras reverberantes.
El fragmento como forma de presentación de un texto es en sí mismo una incógnita, algo incompleto. ¿Qué había escrito antes, qué después? ¿A qué se refiere? ¿Con quién dialoga? ¿Cuál es su intención? A su vez implica un posible campo para la creatividad. ¿Si precediera esto? ¿Si continuara de esta manera? ¿Hoy a qué referiría? Podemos apoyarnos en ellos para construir. El fragmento es la forma de presentar información en nuestra contemporaneidad. El fragmento es: descontextualización, fracciones de discursos, imágenes sueltas, intervenciones recortadas, opiniones sin argumentación. Vídeos y textos de gran intensidad impactando, golpeando, aturdiendo. Deberíamos tener la costumbre de interrogar al fragmento.
Para leer a Safo necesitamos ayuda. Safo escribió en griego antiguo. Los fragmentos que nos han llegado están escritos en griego clásico. Si no conocemos el idioma y la cultura es necesario o bien aprenderlos o bien acudir a una traducción.
La traducción es una mediación necesaria. La traducción nos permite un acercamiento. La traducción nunca es neutral. El traductor no es el poeta. El traductor aplica su criterio para establecer cómo transmite el texto original. Traducir es un acto creativo. En este caso acudimos a la traducción de los fragmentos de Safo realizada por Anne Carson en If not, winter, edición bilingüe griego clásico/inglés, First Vintage Books Edition, Nueva York, agosto 2003.
Anne Carson existe. Es canadiense. Es poeta. Es traductora. Es ensayista. Ha trabajado como profesora de lenguas clásicas en universidades de Estados Unidos y Canadá. Conoce tanto el griego clásico como la cultura clásica y su influencia en el presente. En poesía explora cómo lo poético flota sobre lo formal. En su traducción de los fragmentos de Safo realiza una introducción histórica, cultural y aporta fuentes clásicas. Es pródiga en notas y comentarios.
Se trata de una poeta que traduce a otra poeta con respeto. Esto es importante. Los textos originales están escritos a mano, en papiros maltratados por el tiempo, con agujeros. Falta texto. No hay separación entre palabras. Los amanuenses que copiaron durante siglos las obras donde se citaba a Safo podían transformar el texto mediante el error en la copia o discrepancia. Las decisiones de interpretación del texto definen el sentido. A modo de ejemplo véase la nota 1.1 de If not winter sobre el fragmento 1 donde Carson expone sus argumentos para elegir la palabra “poikilophron” frente a la palabra “poikilothron”, preferida con anterioridad por otros traductores. Esta elección establece la diferencia entre que Afrodita tenga como atributo una mente ágil, sutil, cambiante, múltiple, brillante... o que su atributo sea estar sentada en un trono policromado. Las razones aducidas son tanto de índole filológica como poética: los atributos de Afrodita son importantes dentro del contexto del poema. Ambas palabras suenan similares, quizá Safo utilizó esa paronimia en beneficio del poema: Afrodita se encuentra sentada en un trono policromado mientras urde sus planes con mente brillante. La expresión utilizada por Anne Carson en inglés es “of the spangled mind”. Literalmente significa “de la mente lentejuelada” o “de la mente cubierta de lentejuelas”. Las lentejuelas de metales preciosos se utilizan desde el S. XIV a.c. Eran un signo de estatus. Eran signo de poder. Estaban relacionadas con la belleza. Las lentejuelas son pequeñas piezas brillantes cosidas unas junto a otras de tal manera que el tejido completo brilla según cómo la luz incide independientemente en cada una de ellas. No es un brillo uniforme. Cada parte aporta un reflejo único al conjunto, lo que genera múltiples matices. Si cambiamos de metáfora a una más actual, por ejemplo a una relacionada con el cuerpo-máquina, la mente de Afrodita sería una GPU: Graphics Processing Unit. Unidad de procesamientos gráficos. Este tipo de procesadores constan de un conjunto de pequeñas celdas individuales que procesan los datos autónomamente y en paralelo. El resultado es gran rapidez y capacidad de cómputo de información. Son utilizadas en entornos que requieran elevado poder de proceso o entornos gráficos, por ejemplo, videojuegos, 3D o química cuántica. Cada época tiene su propio código simbólico.
Recordemos que Safo fue una poeta referente ya en su tiempo. El trabajo consciente y profundo con que abordaba la construcción del poema fue reconocido. No resulta baladí ni la elección de las palabras ni la forma de los poemas. Construyó una métrica y por tanto un ritmo, que aún se practican hoy: verso sáfico y estrofa sáfica. Carson llega a soluciones diferentes a las de otros traductores pues hace el esfuerzo de aprehender eso que de poético flota aún en el texto, intentando reflotarlo y sacarlo a la luz. Esta es la razón por la cual trabajamos sobre la traducción de Carson y no sobre cualquier otra: confiamos en ella.
Las raíces existen. Según el diccionario de la RAE, en su tercera acepción “raíz” es “f. Parte de una cosa, de la cual, quedando oculta, procede lo que está manifiesto”. Reconozco y reivindico la poesía de Safo como parte de las raíces de mi cultura y por tanto se encuentra entre el conjunto de las raíces que me alimentan. Reclamo el derecho de transformación sobre lo que ya me constituye. Carson escribe en inglés. Confieso un manejo de ese idioma adecuado para trabajar en contextos cotidianos pero carezco de las herramientas filológicas para traducir profesionalmente. Es desde esta posición desde la que me arriesgo a traicionar creativa y libremente el texto como propuesta poética. Libremente no significa de cualquier manera.
Este libro no es un espacio donde se traducen poemas. Son traiciones libres de textos traducidos por Carson sobre fragmentos de Safo. ¿Qué permanece visible de su pensamiento hoy y aquí? ¿Qué temas trató que ahora nos son ajenos? ¿Qué nos mueve a seguir volviendo a Safo? ¿Cómo se abren los fragmentos cuando realizamos un esfuerzo de análisis sobre ellos? Se trata de un ejercicio de conexión pasado-presente.
No hay citas de Safo y sin embargo todos los aciertos son suyos.
No hay citas de Anne Carson y sin embargo todos los aciertos son suyos.
Los errores son míos y los reclamo.